Real Madrid enfila hacia Vigo por tres puntos importantísimos como meta. Más importantes, quizás, de lo que lucían a principios de febrero cuando debía enfrentarse al Celta en la jornada 21 en un partido que fue aplazado para este miércoles debido a los daños causados en el estadio de Balaídos por un temporal.
Gracias a esos tres puntos ‘virtuales’ del partido suspendido, Madrid ha podido llegar a la penúltima jornada dependiendo de sí mismo pese a haber perdido el liderato cuatro jornadas antes. Y dándose el lujo de enfrentar la mitad de estos sin titulares.
La inusual situación ha quitado algo de preocupación a los hombres de Zinedine Zidane pese a tener a Barcelona por delante, pero eso no significa, aseguró el entrenador francés, que el equipo merengue se relaje. O peor, que una hipotética victoria en Balaídos los haga sentirse ‘campeones antes de tiempo’.
“Para nada (se sienten campeones). Tenemos que seguir hasta el último minuto del último partido. No vamos a relajarnos para nada y esto te lo aseguro. Luego que pase lo que pase, pero no porque nosotros pensemos que vamos a ganar (antes de tiempo). Para nada”, dijo el entrenador del Real Madrid tras el último entrenamiento de su equipo antes de emprender el viaje hacia Galicia.
Zidane asegura que en el vestidor no se habla, siquiera, del ansiado ‘doblete’ (Liga y Champions) que no cae en la casa blanca desde 1959 pues aún lo ve lejos. Particularmente en estos momentos en que el Madrid se juega materializar ese “colchón” de puntos que le ha permitido vivir con cierta comodidad hasta el momento, o por el contrario, poner la Liga en bandeja al máximo rival. Y eso sí que no se lo pueden permitir.
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