Estos cambios se están haciendo poco a poco para habituar al espectador al nuevo rol del show azul. El primer paso fue el cambio de head booker que se realizó el mes pasado, dónde el escritor principal de NXT pasó a ser el de SmackDown. Además, podemos ver cómo, poco a poco, van dando más minutos en SmackDown que en RAW al desarrollo de algunas storylines, cómo fue el caso del feudo entre Bray Wyatt y Dean Ambrose.
Aclarar que, pese a los cambios, la WWE no baraja la posibilidad de volver a separar los shows con dos rosters y campeones independientes, tan sólo volverá a darle esa importancia de cara al espectador que solía tener el show y el primer paso para ello es hacer avanzar las historias en SmackDown para que no ocurra todo lo relevante en RAW.